EL ESPIRITISMO EN ARAGÓN
29 octubre 2013 por idafe
Presentación
Tenemos el placer de compartir con todos los espiritistas y visitantes de este blog un notable artículo del que es autor Fabián Palasí Martín -una de las más altas personalidades del espiritismo español- que contiene importantes datos históricos del espiritismo en Aragón. El mismo fue una colaboración que se insertó en el libro “Biografías, Artículos y Datos espiritistas”, recopilados por Eduardo E. García y publicado por la Revista Psicológica La Irradiación (Madrid, 1896), páginas 190-198.
Hay un deber ineludible para los espiritistas españoles, y es procurar no perder -y en lo posible recuperar- las huellas de la senda por donde transcurrieron las ideas a la que somos tan afectos y sus protagonistas en nuestro país, a pesar de los tremendos vacíos que la convulsa historia de España ha provocado en la memoria colectiva de la mano de las intransigencias políticas que cercenaron por largos periodos la normal y libre expresión de las ideas entre los españoles.
Los espiritistas españoles de hoy en día tenemos que recordarnos y transmitir esta memoria a las generaciones venideras por respeto a los grandes pioneros que jalonaron con sus luminosas presencias las edades pasadas, y también por respeto a nosotros mismos. Esperamos que este artículo que recuperamos sea una buena contribución para alcanzar ese objetivo.
Oscar M. García Rodríguez PRESIDENTE DEL GRUPO ESPÍRITA DE LA PALMA

APUNTES PARA LA HISTORIA DEL ESPIRITISMO

En 1869, y a raíz de la muerte o
desencarnación del maestro Allan Kardec fue nombrado capitán general de
Aragón D. Joaquín Bassols y Marañosa, teniente general de los
ejércitos nacionales. Había conocido el. Sr. Bassols el espiritismo
durante la emigración, y toda la familia participaba de las mismas
creencias, siendo médiums dos de sus hijos: Santiago y César.
Las primeras sesiones espiritistas fueron
como familiares, y se verificaron en el mismo edificio de la capitanía
general. A ellas acudían, además de la familia Bassols, algunos
aficionados al espiritismo, y entre ellos D.
Bartolomé Castellví, que ya había asistido en París a las mismas
sesiones de Kardec, don Eduardo López del Plano, D. Miguel Sinués; D.
Manuel Rozas, el vizconde de Torres Solanot y otros, entre los que se
contaban varios oficiales de la guarnición, como D. Saturnino Fernández
Acellana, hijo político del general Bassols, Primo de Rivera, Echaluce
y muchos más que no citamos.
Al crecer en número e importancia este
grupo, se constituyó en sociedad formal, adoptando el título de
«Progreso Espiritista», y celebró sus primeras sesiones en un
local de la plaza del pueblo. Su primer presidente fue D. Saturnino
Fernández Acellana; vicepresidentes, D. Miguel Sinués, abogado y
propietario, y D. León Cenarro, magistrado y secretario don Patricio
Morales. El general Bassols siguió como presidente honorario.
A las sesiones de esta naciente sociedad
fue invitado un modesto empleado, Daniel Suárez Artazu, quien desde
luego se manifestó como un poderoso médium escribiente. Por su conducto
se recibieron, primero algunas comunicaciones y consejos de Cervantes, y
luego el hermosísimo libro Marietta, (Páginas de dos
existencias) que editó la sociedad espiritista, cuya segunda parte
(Páginas de Ultratumba) fue dictada en Madrid al mismo médium.
Al propio tiempo que el médium Daniel
Suárez recibía los sublimes dictados de Marietta y Estrella, otro
médium, César Bassols, recibía otro libro medianímico, dictado por el
espíritu de William Pitt titulado La educación de los pueblos, que también editó la misma sociedad.
El 1.° de Enero de 1871 se empezó la publicación de una revista quincenal con el mismo título que la sociedad El Progreso Espiritista, de
la que sólo se publicaron siete números, por el quebranto que la
sociedad sufrió al ser llamado el general Bassols para ministro de la
Guerra, siendo al propio tiempo trasladados a Madrid muchos de los
socios que componían la sociedad «Progreso Espiritista», de Zaragoza, y
otros que, como el Vizconde de Torres Solanot, marcharon por su gusto.
Las reuniones siguieron desde esta fecha
con un carácter privado en casa de algunos hermanos, hasta que se
reorganizó la asociación en 1878 con el nombre de «Sociedad de Estudios
Psicológicos», cuyo reglamento fue aprobado por la autoridad
gubernativa en 24 de Septiembre del mismo año; y con este título y
organización continúa.
En el mismo año de 1878 inauguró sus tareas el Diario Católico de
Zaragoza con una serie de artículos y desplantes contra el
espiritismo. Tan pronto se apercibió de ello el entonces presidente, D.
Miguel Sinués (que se hallaba en su pueblo de Moyuela), regresó y
dirigió un comunicado contestando al Diario Católico, quien lejos
de insertarlo, tomó de ésto pie para nuevos ataques, haciendo
referencia a los escritos que, o por miedo o por insigne mala fe, se
negaba a publicar. Igual suerte sufrieron todos cuantos remitidos envió
el señor Sinués al citado Diario Católico, así como los dirigidos a La Unión Católica de
Valencia, que también tomó cartas en el asunto. Viendo tan desleal
proceder, editó el Sr. Sinués por su cuenta un libro de 200 páginas, al
que tituló El Espiritismo y sus Impugnadores, y en el que se insertaron todas las contestaciones que se negó a publicar el Diario Católico de Zaragoza.
En la cuaresma de 1880 predicó el
canónigo don Juan Codera en el templo del Pilar una serie de sermones
contra el Espiritismo; y desde entonces empezó a tomar nuevo y mayor
incremento la Sociedad Espiritista de Zaragoza. El predicador daba
noticia extensa (salvo algunos errores, quizá voluntarios) de cuanto
sucede en las reuniones espiritistas; las diferentes mediumnidades y
comunicaciones tiptológicas, escritas, parlantes, videntes, etc., que
allí se reciben, todo ello, según él, por intervención del diablo; con
lo cual no hizo sino sobrexcitar la curiosidad de las personas
asistentes a dichos sermones, quienes deseando sin duda entrar en
relaciones con Satán, proporcionaron bastante trabajo a los
carpinteros y ebanistas con los pedidos de veladores. El Vizconde de
Torres Solanot, que a la sazón se encontraba en Madrid, trasladó a
Zaragoza temporalmente la Revista Espiritista que allí dirigía, con objeto de refutar los asertos erróneos y calumniosos que vertiera el orador sagrado.
Por este tiempo se crearon también varios
grupos familiares, a cuyas sesiones iban muchos entusiastas que no
podían o no se atrevían á manifestarse públicamente, y en estas
reuniones se recibían útiles enseñanzas y hallaban pruebas los
que de ellas necesitaban. Entre estos grupos, los más importantes
Fueron los dirigidos por D. José Maynou y don Francisco Ferrari. Los
asistentes a estas sesiones pertenecieron, en su mayoría, a la
«Sociedad de Estudios Psicológicos».
En Septiembre de 1883 empezó en Zaragoza
la publicación de un periódico racionalista, que desde los primeros
números se conquistó un lugar honroso entre la prensa siendo a la vez el
blanco de las iras de los retrógrados y objeto da una tenaz
persecución por parte de aquel gobierno Se tituló esta publicación
decenal Un Periódico Más y en ella, durante los
tres años que vivió, se propagó el espiritismo sin nombrarlo, según
aconsejaron los espíritus. La Sociedad Espiritista de Zaragoza
suministró 250 pesetas para los primeros gastos, sus socios fueron los
primeros accionistas y suscriptores, y los individuos de ella, señores
Vizconde de Torres Solanot, Navarro (D. Félix), Pallol (padre e hijo),
Palasí y Maynou, prestaron gratuitamente sus servicios como redactores.
El periódico mereció las excomuniones del Cardenal Arzobispo de
Zaragoza y de otros varios prelados, y a él se debió en gran parte la
creación de las escuelas laicas.
En 1884 se recibió un libro medianímico
por el médium V. B. de la Sociedad; ésta, después de examinar su
contenido, lo patrocinó y editó, poniéndole por título “Una defensa más del Espiritismo”.
A consecuencia de las predicaciones de
una misión jesuítica, se reunieron los elementos racionalistas y
crearon las escuelas laicas de niños y de niñas que se inauguraron el 18
de Enero de 1885. La sociedad espiritista prestó gratuitamente su
local durante los seis primeros meses, y sus socios fueron y son aún
sus más decididos protectores.
En Junio de 1887, a instancias y por la
iniciativa del hermano M. N. M., la «Sociedad de Estudios
Psicológicos» de Zaragoza se constituyó en centro interino de La Solidaridad. (Federación para la propaganda gratis del Espiritismo), publicando además de la Circular para procurar adhesiones, siete Hojas de propaganda, cuatro Folletos y otros cuatro Boletines de la Asociación. Estas Hojas las continúa actualmente la Revista de Estudios Psicológicos de Barcelona.
En lo interior, la Sociedad Espiritista
de Zaragoza ha tenido siempre un carácter más bien científico que
práctico, asemejándose sus sesiones a las de un modesto ateneo. De las
dos sesiones semanales, la de los domingos y días festivos se dedica a
estudios teóricos; la otra, a la explicación de las diferentes
mediumnidades, pruebas y desarrollo de médiums. En las sesiones
teóricas se da preferencia a los temas presentados por los socios, y
cuando no existen temas se explica y comenta uno de los libros de la
filosofía, o de cualquier autor que con ella se relacione; pues en el
año actual se ha analizado y discutido el libro “Fuerza y Materia”,
de L. Büchner; y ¡ojalá tuviéramos en nuestra biblioteca todos cuantos
libros se han escrito contra el Espiritismo!… Sólo examinando el pro y el contra es como se aquilata el valor de una idea.
Pero no porque el carácter general de la
Sociedad sea el apuntado, ha dejado ésta de proponerse siempre en sus
estudios algo práctico (aunque bien mirado no hay más práctico que
acrecentar el caudal intelectual de nuestro espíritu), intentando y
obteniendo pruebas medianímicas y comunicaciones de útil enseñanza.
Basta citar para muestra los retratos medianímicos de Pitt, de Marietta y
Estrella obtenidos en la primitiva Sociedad; el de Jesús, allá por el
año 1879, y las comunicaciones «Sobre el periespíritu, y la obsesión» (Médium F. P.); publicadas en la Revista de Estudios psicológicos de
Barcelona, en Julio y Agosto de 1883, y traducidas y reproducidas en
todos los periódicos espiritistas de Europa y América. Lo que queremos
dar entender es que se ha huido todo lo posible de caer en esas sesiones
rutinarias en las que nada se estudia ni se aprende, donde suele
pasarse el tiempo en hacer preguntas indiscretas a los espíritus por
medio del velador o de los médiums parlantes o escribientes, resultando
al final de todo la desilusión o las obsesiones, por haber descuidado la
base, que son las teorías.
Por el año 1888 se formó en la Sociedad
una sección llamada de «Experimentos», en la que nos proponíamos
obtener algún fenómeno del orden psicofísico. Carecíamos de médiums
especiales, pero a falta de un Home, de un Eglinton, de un Slade o de
una Eusapia, teníamos la intuición o presentimiento de que, o se
desarrollarían en estas sesiones, o acumularían los espíritus el fluido
de todos los asistentes para producir algún fenómeno. Esta sección
llegó a ser demasiado numerosa (algunas noches había más de
treinta personas), y habiendo indicado los espíritus que seria muy
difícil uniformar fluidos tan heterogéneos, por serlo los pensamientos y
voluntades de los congregados, se desistió después de más de dos años
de escasos resultados, y entonces se pensó en crear un grupo menos
numeroso con los elementos más apropiados.
En 1891, después de algunos trabajos
previos, se constituyó el «Grupo Irene», el cual se dedicó en un
principio a la sugestión de espíritus atrasados, por el intermedio de un
sonámbulo y médium de posesiones, hasta que los espíritus que dirigían
estos trabajos aconsejaron tomar las pizarras para ver de obtener la
escritura, directa por la acumulación de fluidos en sesiones sucesivas.
La primera prueba se obtuvo el 18 de Junio de 1892, después de dieciocho
sesiones de media hora: las siguientes no costaron tanto, y algunos se
obtuvieron en una sesión. Estos fenómenos se han realizado en las
condiciones más rigurosas de experimentación, con luz de gas en la
habitación, en caja cerrada con candados, y a veces precintada,
lacrada y sellada, y habiendo siempre en la reunión tres o cuatro
personas además de los médiums. En estas condiciones se han obtenido las
dieciséis pruebas que poseemos, de las cuales hay tres en francés, sin que los médiums supieran este idioma.
Por último, hemos de indicar también que
en Zaragoza y por individuos y médiums de la «Sociedad» (los Sres. D.
Félix Navarro y D. Domingo y D. Benigno Pallol,
especialmente) se empezó allá por el año 1881 la interpretación
filosófica de la obra de Cervantes Don Quijote de la Mancha,
obra medianímica, cuya impresión está casi terminada, y que ha de
llamar poderosamente la atención a propios y extraños en el mundo
literario.
Además de la mencionada “Sociedad” de
Zaragoza y de algunos centros y grupos familiares que no indicamos,
existen en los pueblos de la provincia una Sociedad Espiritista
en Epila, con reglamento aprobado por la autoridad en Julio de 1892;
grupos familiares en Pina, Aguilar, El Burgo de Ebro y Arcos, y algunos
hermanos en Villanueva de Gallego (donde hubo en otro tiempo un centro
regular), Calatayud y pueblos del campo de Cariñena.
En la provincia de Huesca existe en la
capital la “Sociedad Sertoriana de Estudios psicológicos”, cuyo
reglamento fue aprobado por la autoridad en 14 de Mayo de 1877. Esta
Sociedad empezó en 1883 la publicación de un periódico titulado El Iris de Paz,
redactado por D. Quintín López y algunos otros hermanos, especialmente
el Vizconde de Torres Solanot. El Iris fue excomulgado por el obispo de
Huesca desde el primer número y sostuvo con éxito algunas polémicas con
los diarios católicos de aquella ciudad. Últimamente el hermano Quintín
López ha publicado en San Martín de Provensals (Barcelona) donde hoy se
encuentra, un libro titulado Catolicismo y Espiritismo, como
refutación a los ataques que nuestra doctrina sufrió del clero oscense.
No sabemos que en la provincia de Huesca
haya ninguna otra Sociedad espiritista, pero sí se hallan algunos
hermanos en Jaca, Fraga y Ontiñena.
En la de Teruel no sabemos que hasta
ahora haya más espiritistas que los del pueblo de Molinos, en donde lo
son la mayoría, y que sirven de ejemplaridad moral a todos los pueblos
comarcanos.
Este es, a grandes rasgos, el estado y
desarrollo del espiritismo en la región aragonesa, según los datos que
poseemos. Como se ve, en los pueblos rurales de corto vecindario la idea
no se manifiesta, bien porque sea desconocida, o bien, ¡y esto es lo
más probable!, por temor a las vejaciones y atropellos del caciquismo,
incitados por el fanatismo religioso. Pero el terreno está abonado, y
mucho, muchísimo, podría conseguirse si dispusiéramos de tiempo y de
medios para emprender una campaña personal a fin de despertar e iluminar
aquellas conciencias dormidas u ofuscadas por el error secular.
Fabián PalasíTOMADO DE: http://grupoespiritaisladelapalma.wordpress.com/2013/10/29/el-espiritismo-en-aragon/
No hay comentarios:
Publicar un comentario